En un memorando del 8 de julio, obtenido por primera vez por el Washington Post, el gobierno de Trump tomó medidas para prohibir efectivamente las audiencias de fianza para millones de inmigrantes que esperan sus audiencias judiciales. El cambio de política, descrito en una directiva emitida por el director interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), Todd Lyons, ordena a los agentes de ICE encarcelar a los inmigrantes “durante todo el transcurso de sus procedimientos de deportación”, los cuales suelen durar meses, e incluso años.
Abogados que hablaron con el Post señalaron que la directiva se aplicará a “millones de inmigrantes” que ingresaron a Estados Unidos por la frontera con México “en las últimas décadas”.
Según datos recopilados por el Transactional Records Access Clearinghouse (TRAC) de la Universidad de Syracuse, hay más de 3,4 millones de casos pendientes ante los tribunales de inmigración de EE.UU. De esos, más de 2,2 millones involucran a inmigrantes que esperan audiencias de asilo ante un cuerpo de aproximadamente 700 jueces de inmigración.
Bajo administraciones anteriores, los inmigrantes generalmente podían ser liberados bajo fianza mientras esperaban sus audiencias, en parte debido a que por años los tribunales de inmigración sufrían graves retrasos. En marzo de 2025, TRAC descubrió que el tiempo promedio de espera a nivel nacional para todas las audiencias era de 636 días, es decir, casi dos años. El San Francisco Chronicle informó en junio que los solicitantes de asilo esperan un promedio de 4,5 años antes de su primera audiencia de inmigración, según datos de 2019 a 2025.
Hasta junio de 2025, TRAC encontró que los jueces de inmigración realizaron 39.818 audiencias de fianza, concediendo la liberación bajo fianza en 12.438 casos.
Según el Post, el nuevo memorando busca eliminar las audiencias de fianza en prácticamente todas las circunstancias. El periódico indicó que los Departamentos de Justicia y de Seguridad Nacional bajo Trump “revisaron su posición legal sobre las facultades de detención y liberación” y determinaron que los inmigrantes “no pueden ser liberados de la custodia de ICE”.
El memorando declara que los inmigrantes sólo deben ser liberados bajo fianza antes de sus audiencias en circunstancias “raras”, y que tales decisiones serán dictadas por el propio ICE, no por un juez de inmigración.
El Post también señaló que el comisionado de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, Rodney Scott, “emitió una directiva similar la semana pasada”. Ninguna de las agencias federales respondió a las preguntas del Post.
La directiva del ICE bajo el gobierno de Trump constituye una repudiación de los principios invocados en la Declaración de Independencia, restableciendo el privilegio real de la prisión arbitraria. La Octava Enmienda prohíbe la “fianza excesiva” y, por implicación, afirma que la fianza debe estar disponible normalmente, salvo en casos extraordinarios como riesgo de fuga o peligro para la sociedad.
Al prohibir categóricamente las audiencias de fianza para millones de inmigrantes—cuyo único “crimen” en la gran mayoría de los casos es haber huido de países víctimas de sanciones, invasiones militares o provocaciones del imperialismo estadounidense—el ICE no solo impone una fianza excesiva, sino que elimina completamente el derecho a ella para una clase entera de personas, instituyendo así un sistema de detención indefinida.
La Corte Suprema ha dictaminado históricamente que incluso los no ciudadanos tienen ciertos derechos constitucionales cuando se encuentran en suelo estadounidense. El fallo en el caso Zadvydas v. Davis (2001) estableció límites a la detención indefinida de inmigrantes. Esta directiva desafía abiertamente tales precedentes legales.
Esta medida de corte fascista es parte de una campaña más amplia del Estado capitalista para criminalizar y aterrorizar a los sectores más vulnerables de la clase trabajadora. Ya este año, el gobierno de Trump ha revocado o eliminado protecciones para más de medio millón de inmigrantes bajo el programa de permiso humanitario para Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, mientras elimina el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para aproximadamente un millón de personas, incluidos cientos de miles de haitianos que han vivido en EE.UU. por más de una década.
Las condiciones dentro de los centros de detención migratoria, tanto estatales como federales, son notoriamente horribles y letales. El mes pasado, CBS News, citando un aviso enviado al Congreso por ICE, informó que 13 personas han muerto bajo custodia de ICE este año, superando las 12 muertes registradas en todo 2024.
Entre los que han fallecido bajo custodia de ICE este año se encuentra Johnny Noviello, un ciudadano canadiense de 49 años que se convirtió en residente permanente legal en Estados Unidos en 1991. Según ICE, Noviello fue “encontrado inconsciente” el 23 de junio en el Centro de Detención Federal de la Oficina de Prisiones en Miami.
El memorando que elimina las audiencias de fianza fue emitido solo unos días después de la aprobación del llamado “Big Beautiful Bill”. Esta legislación asigna 175.000 millones de dólares a la Gestapo migratoria y a operaciones de deportación masiva, incluyendo la expansión de una red de campos de concentración privados con fines de lucro. La negativa a conceder audiencias de fianza es necesaria para justificar y llenar la vasta infraestructura de detención financiada por esta ley, que es pagada mediante recortes masivos a Medicaid y a programas de asistencia alimentaria para personas de bajos ingresos, incluidos niños.
Los ataques contra los inmigrantes, incluyendo la eliminación de audiencias de fianza, son ataques contra los derechos democráticos de toda la clase trabajadora. Lo que comienza con los inmigrantes se ampliará para atacar a todos los trabajadores estadounidenses que participen en huelgas, protestas u oposición política contra la clase dominante y su gobierno de, por y para la oligarquía financiera.
El gobierno de Trump planifica de forma abierta ampliar la operación de deportación masiva militarizada para incluir a ciudadanos “nacidos aquí” y a quienes fueron naturalizados con anterioridad. Para normalizar la presencia de tropas en las calles de EE.UU., casi 5.000 efectivos de la Guardia Nacional de California y marines estadounidenses han sido desplegados en Los Ángeles durante más de un mes para asistir a la policía migratoria en sus operaciones de secuestro.
El martes, se informó que aproximadamente la mitad del contingente de 3.882 efectivos de la Guardia Nacional de California sería relevado de su deber, dejando 1.892 miembros de la 49.ª Brigada de Policía Militar. En una declaración que confirma el relevo, el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, agradeció “a nuestras tropas que respondieron al llamado”, afirmando que “la ilegalidad en Los Ángeles está disminuyendo”. Agregó: “Por lo tanto, el secretario ha ordenado el retiro de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional de California de la 79.ª Brigada de Combate de Infantería de la misión federal de protección”.
A principios de este mes, como parte de la Operación Excalibur, cerca de 80 efectivos de la Guardia Nacional en vehículos militares realizaron una operación de barrido y despeje fuertemente militarizada en MacArthur Park, en Los Ángeles. Esta operación de combate en una comunidad con alta población inmigrante provocó un rechazo generalizado y protestas por parte de los residentes.
También el martes, Military.com informó que un contingente de 500 marines especializados en logística e ingeniería, conocidos como “Task Force Sapper”, será reemplazado en la frontera entre Estados Unidos y México por una “unidad logística de combate”.
El medio señaló que el nuevo contingente se llama “Task Force Forge” y está compuesto por marines del Batallón de Logística de Combate 15, que forma parte de la I Fuerza Expedicionaria de Marines (I MEF, por sus siglas en inglés). Durante la invasión estadounidense a Irak en 2003, la I MEF desempeñó un papel central en el ataque, ingresando a Bagdad el 9 de abril de 2003.
(Artículo publicado originalmente en inglés el 15 de julio de 2025)
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